La cúrcuma es una especia muy popular en todo el mundo, especialmente en la India y otros países asiáticos.
Se obtiene de la planta Curcuma longa.
Se utiliza ampliamente como colorante alimentario y como ingrediente en la cocina. Es conocida por su color amarillo intenso y su sabor ligeramente picante. También es uno de los principales componentes del curry en la cocina india.
Se ha utilizado durante siglos en la medicina ayurvédica y en la medicina china para tratar una variedad de dolencias y enfermedades.
Sin embargo, la cúrcuma no solo es un ingrediente delicioso, también tiene muchos beneficios para la salud.
Beneficios para la salud de la cúrcuma
- Propiedades antiinflamatorias
Está demostrado que los compuestos activos de la cúrcuma, especialmente la curcumina, pueden reducir la inflamación en el cuerpo. La inflamación crónica está asociada con muchas enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas, diabetes, artritis y cáncer.
Por lo tanto, el consumo regular de cúrcuma puede ayudar a prevenir estas enfermedades.
- Mejora la digestión
La cúrcuma también mejora la digestión. Se cree que la cúrcuma estimula la producción de bilis en el hígado, lo que ayuda en la digestión de las grasas, y alivia los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII) y otros trastornos gastrointestinales.
- Ayuda a reducir el colesterol
Se ha demostrado que la curcumina favorece la disminución de los niveles de colesterol LDL (el colesterol «malo») y triglicéridos en el cuerpo, previniendo de ese modo enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
- Propiedades antioxidantes
Es un potente antioxidante y puede ayudar a prevenir el daño celular. Los antioxidantes ayudan a proteger el cuerpo contra los radicales libres, que son los que pueden dañar las células y contribuir al envejecimiento y a enfermedades crónicas.
- Propiedades anticancerígenas
Algunos estudios han demostrado que la curcumina puede llegar a inhibir el crecimiento de células cancerosas y reducir el riesgo de cáncer de colon, mama, próstata y pulmón.
Aunque queda aún un largo camino por recorrer para determinar la eficacia de la cúrcuma en la prevención y el tratamiento del cáncer.
Como tomarla
- Añadir cúrcuma a tus comidas: La forma más fácil de incorporar cúrcuma en tu dieta es añadiéndola a tus comidas. Puedes espolvorear cúrcuma en tus huevos revueltos o en tu sopa, o incluso agregarla a tus batidos. La cúrcuma también se utiliza a menudo como un ingrediente en mezclas de especias, como el curry en polvo.
- Hacer té de cúrcuma: El té de cúrcuma es una forma popular de consumir cúrcuma. Para hacerlo, hierve agua en una olla, agrega una cucharadita de cúrcuma en polvo y déjala reposar durante unos minutos. Puedes agregar miel o limón para mejorar el sabor.
- Tomar suplementos de cúrcuma: Si no te gusta el sabor de la cúrcuma o no puedes encontrar formas de incorporarla en tu dieta, los suplementos de cúrcuma son una opción. Los suplementos de cúrcuma están disponibles en forma de cápsulas, tabletas y polvos. Asegúrate de seguir las instrucciones de dosificación en el envase y consultar a un médico antes de tomar cualquier suplemento.
Es importante tener en cuenta que pese a ser beneficiosa en general, no es adecuada para todas las personas.
Si estás tomando medicamentos o tienes una afección médica, como cálculos biliares o problemas de coagulación sanguínea, es posible que debas evitar la cúrcuma o consultar a un médico antes de consumirla.
Es importante tener en cuenta que la cúrcuma puede interactuar con ciertos medicamentos, como anticoagulantes y antiinflamatorios, por ello es muy importante hablar con tu médico antes de comenzar a tomar cúrcuma.