Todos los seres humanos han experimentado en algún momento de su vida tristeza de vez en cuando. Sin embargo, la depresión clínica, es una condición debilitante y constante que interfiere las actividades diarias de un apersona. Muchas veces acompañadas de sentimientos extremadamente negativos, de culpa e incapacidad. Algunos comportamientos más comunes en este tipo de trastornos se describen a continuación:
- Desmotivación. Muestra apatía a actividades cotidianas como trabajar, estudiar o atender el hogar, asearse y cocinar. Le resulta más fácil abandonar cualquier actividad por falta de energía o desinterés, razón por la cual quizás duerma más horas de lo normal.
- Aislamiento. Este es observable cuando la tendencia es a no asistir a eventos sociales de amigos y familiares. Al principio era de preferencia grupos pequeños y sin mucha algarabía .Incumpliendo a citas en la que ya había afirmado que asistiría. Pasa mucho tiempo en su habitación, manifestando que prefiere estar solo y no hablar.
- Falta de concentración. Muchas personas manifiestan que les cuesta mucho trabajo concentrarse, aunque se esfuercen, lo que ve seriamente afectado su rendimiento laboral.
- Dependencia al alcohol y tabaco. Si se encuentran estresados o ansiosos recurren a este medio como parte de la solución, sumiéndose cada vez más en la misma actitud mental.
- Inseguridad. Algunos han alegado que anteriormente eran personas de decisión, pero cambiaron su actitud al no saber qué hacer en situaciones relativamente sencillas. Así que no emprenden proyectos nuevos como estudiar, un nuevo empleo, mejor cargo laboral, una casa o un auto nuevo.
- Irritabilidad. Se presenta en dificultades pequeñas, la reacción es adversa y agresiva sin razón aparente para ello.
- Impuntualidad y desorden. A consecuencia de ello, pierden sus empleos, por continuamente llegar tarde, no cumplir a tiempo con sus responsabilidades o perder documentos importantes. Su casa se ha vuelto un lugar desordenado y sucio.
- Controladores. Su vida se vuelve una rutina y si algo sucede y lo cambia, se altera su carácter. En algunas ocasiones necesitan dinero suficiente para gastar en cosas innecesarias, pero que le dan un sentimiento de calma.
- Insomnio. Es probable que se desvelen o alcancen dormir pocas horas y después no tengan más sueño. Razón por la cual se conviertan adictos a la tv, videojuegos o el internet.
- Mal genio. Dejan de sonreír, bromear, toda la percepción de su mundo es gris y negativo, no hay razones para celebrar y ser feliz. Por consiguiente, dan un trato hostil a hijos o pareja.
- Prefieren la oscuridad. Abrir las ventanas, salir al patio, sembrar una planta, jugar o hacer ejercicio fuera, resulta ser tóxico para ellos.
- Pensamientos suicidas. Quizás este sea una de los más preocupantes, pues no solo ha manifestado su deseo de morir sino que lo han intentado, otras muestras de preocupación a este respecto puede ser la autoagresión la cual puede presentarse de forma verbal o física.
Lo cierto es que cada persona sufrirá la depresión de manera distinta, la forma en que actué determinará hasta qué grado le está afectando e indicarnos si es hora de buscar ayuda profesional.