El masaje con piedras calientes es una técnica de masaje que utiliza piedras calientes para aliviar la tensión muscular, mejorar la circulación, la ansiedad y otros trastornos emocionales.
Este tipo de masaje se ha practicado desde hace miles de años en culturas de todo el mundo y ha sido utilizado para tratar una amplia variedad de dolencias físicas y emocionales.
El proceso comienza con la selección de las piedras calientes, que suelen ser de basalto, una roca volcánica de gran densidad y capacidad de retener el calor. Las piedras se calientan en agua caliente hasta alcanzar una temperatura segura para la persona y se colocan en diferentes partes del cuerpo, como la espalda, las manos, los pies y las piernas para presionar y dar calor a los músculos tensos, haciendo así que se relajen y reduzcan la tensión.
También contribuyen a mejorar la circulación sanguínea, lo que puede reducir la inflamación y aliviar el dolor.
Hay varias técnicas, cada uno de ellas con un enfoque diferente y que se adaptan a las necesidades individuales de cada paciente.
Hay varios tipos de masajes con piedras calientes, cada uno con sus propias técnicas y objetivos. Algunos de los masajes más comunes incluyen el masaje con piedras calientes sueco, el masaje con piedras calientes deportivo y el masaje con piedras calientes shiatsu.
El masaje con piedras calientes sueco se realiza con aceites esenciales y piedras calientes que contribuyen a relajar los músculos y mejorar la circulación sanguínea. Las piedras calientes se sitúan en puntos clave del cuerpo, como la espalda, los hombros y las piernas, y después se masajea con ellas.
El masaje con piedras calientes shiatsu se basa en la medicina tradicional china y utiliza piedras calientes para estimular los puntos de acupuntura. Se aplica para tratar trastornos emocionales y físicos y mejorar el equilibrio energético del cuerpo.
El masaje reflexológico con piedras calientes se basa en la reflexología, combinando esta técnica con el calor de las piedras calientes para proporcionar una experiencia aún más relajante y terapéutica.
Es importante ponerse en manos de un terapeuta cualificado que pueda guiarle en la técnica adecuada para sus necesidades individuales.
